Juan y el Misterio de la Biblioteca Voladora

Parte 1

Juan era una maestra con una sonrisa cálida y cabello castaño que caía en suaves ondas sobre sus hombros. Sus ojos marrones brillaban con inteligencia y amabilidad, y su piel, de un tono medio, reflejaba el sol que entraba por las ventanas de su acogedora aula. Los niños la adoraban, no solo por sus cuentos fascinantes y sus lecciones bien explicadas, sino por algo que guardaba en secreto: Juan poseía una fuerza sobrehumana. Podía levantar pupitres con una mano o mover estanterías enteras sin esfuerzo, un secreto que solo ella conocía y usaba para el bien, para ayudar a sus pequeños aprendices a superar pequeños obstáculos. Un día, un misterio sacudió al pequeño pueblo de Villa Serena. La vieja biblioteca, un edificio lleno de historias y conocimiento, había desaparecido. No se había caído, ni se había quemado; simplemente se había esfumado durante la noche, dejando un claro vacío en la plaza central. El pánico se extendió entre los habitantes, especialmente entre los niños, que veían su lugar favorito de aventuras y aprendizaje vanished. Las autoridades estaban desconcertadas, y nadie podía ofrecer una explicación plausible para la desaparición del edificio. Juan, al enterarse, sintió una punzada de preocupación. Sabía que la biblioteca era el corazón de su comunidad y que su ausencia dejaba un hueco inmenso. Decidió que, aunque no supiera cómo, usaría su fuerza especial para descubrir qué había sucedido. Se despidió de sus alumnos con la promesa de que pronto todo volvería a la normalidad, y con un plan en mente, se dirigió a la plaza donde antes se erigía orgullosa la biblioteca.